Torreón de Lozoya. Salas de Palacio

Del 27 de abril al 24 de julio de 2022

Integran la exposición, 75 fotografías de alto valor documental, antropológico y artístico, realizadas entre 1975 y 1988. La Colección de Arte Contemporáneo Fundación “la Caixa” posee el número más importante de obras de esta serie llamada España Oculta, que se ha convertido ya en un clásico de la fotografía de nuestro país.

La muestra, con textos de Lola Garrido, trata sobre la «España de los pueblos». La artista García Rodero (Puertollano, Ciudad Real, 1949) capta en esta serie, que sigue estando abierta, una España profunda y tradicional que está desapareciendo, la España de los pueblos que la artista ha conocido mientras la recorría y la vivía.

La muestra trata sobre la «España de los pueblos» que la artista ha conocido mientras la recorría y la vivía. La artista documenta en ella las fiestas, las tradiciones y las formas de vida ligadas a la España rural con una original mirada que rehúye los tópicos visuales. La Colección de Arte Contemporáneo Fundación “la Caixa” posee el número más importante de obras de esta serie llamada España Oculta, que se ha convertido ya en un clásico de la fotografía de nuestro país.

Las obras presentan un alto valor documental, antropológico y artístico. Cristina García Rodero inició esta serie, con imágenes de gran profundidad artística, hace más de cuarenta años. «Intenté fotografiar el alma misteriosa, verdadera y mágica de la España popular, con su pasión, el amor, el humor, la ternura, la rabia, el dolor, con su verdad; y los momentos más intensos y plenos en la vida de los personajes, tan simples como irresistibles, con toda su fuerza interior, en un desafío personal que me dio fuerza y comprensión, y en el que invertí todo mi corazón».

La artista ha recibido numerosos reconocimientos, entre los cuales destacan el Premio Nacional de Fotografía (1996), la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas artes (2005) y el premio FotoPres, que otorga la Fundación “la Caixa” (segundo premio en la edición de 1997). Ha compatibilizado la labor docente con la creación fotográfica y la colaboración en varias publicaciones periódicas españolas y extranjeras. Es la primera española que ha entrado a trabajar en la agencia fotoperiodística Magnum.

Esta es la octava vez que se presentan obras de la España Oculta, que ha recorrido los CaixaForum de Tarragona (2010), Lleida (2011) y Palma (2012); la Casa de la Provincia, en Sevilla (2011); el Castillo de Santa Catalina, en Cádiz (2011); el Antiguo Hospital de Santa María la Rica, en Alcalá de Henares (2011), y el Museo Regional de Arte Moderno, MURAM, en Cartagena (2012) y en Mataró (2021) antes de presentarse ahora en el Torreón de Lozoya de Segovia.

Por otro lado, esta nueva exposición de las Salas del Palacio del Torreón de Lozoya vuelve a contar con el patrocinio de CaixaBank, cuya estrecha colaboración con la Fundación Caja Segovia ha dado ya frutos de tan alta calidad como las recientes muestras dedicadas a Rembrandt van Rijn o Henri de Toulouse-Lautrec.

La España oculta de García Rodero

España oculta se ha convertido en un clásico de la fotografía contemporánea. Cuando Cristina García Rodero inició este trabajo convivían dos imágenes complementarias de la vida de las pequeñas poblaciones rurales españolas: por un lado, la España negra, esperpéntica y feroz; por otro, un paisaje idealizado, preservado de las transformaciones del mundo moderno. García Rodero se distanció de ambos modelos, prescindió de los tópicos visuales y concibió su obra como un vasto trabajo de investigación sobre los rituales, las creencias y los usos y costumbres.

Gracias a esta original visión, su trabajo constituye la documentación visual más importante sobre folclore y ritos religiosos de nuestro país. Al mismo tiempo, su obra transciende los límites de la sociología y adquiere una gran profundidad artística.

Cristina García Rodero empezó a fotografiar la fiesta en España en 1973, en un momento en que la sociedad predemocrática daba pasos de gigante en materia de industrialización y los entornos rurales quedaban marginados en el proceso. Los ritos y las costumbres aferrados a la tradición desaparecían y quedaban pocos rastros de su autenticidad.

Su repertorio fotográfico dispone de 200.000 imágenes tomadas a lo largo de 20 años. Uno de los rasgos característicos de este trabajo es la constancia de la fotógrafa, ya que, año tras año, repite cada ceremonia con los mismos participantes, los mismos gestos y la misma indumentaria.

Sus imágenes contienen una auténtica cantera de personajes urbanos y rurales que funcionan como iconos o puntas de lanza de un pasado nostálgico o esperpéntico.

Con esta mirada crítica, Cristina García Rodero ha construido una historia desde abajo, atenta a los pequeños detalles, fruto de la observación y la intuición, ajena a prejuicios ideológicos, despolitizada. El resultado es una manera de dar nombre propio a nuestras fiestas y a nuestros ritos.

Información en medios:

La Vanguardia